El agua floral es una de las posibilidades de vehículo portador del aceite esencial de flores y hojas.
Con un aroma sutil afecta desde el olfato al sistema nervioso cambiando el estado de ánimo hacia la activación o la relajación dependiendo de las propiedades de la planta/flor en cuestión.
Las aguas de azahar, rosa o lavanda, están en el grupo de las relajantes.
Mientras aromas frescos más intensos como romero y geranio son activadores y motivadores, mejoran la atención.
En ambos casos clarifican el pensamiento.
Un agua floral también llamada técnicamente hidrolato, puede ser destilada en alambique, (arrastrando con vapor los aceites esenciales) o reconstituida, (uniendo agua y aceite esencial), según posibilidades.
Otro uso de estas portadoras del alma de las flores es la tonificación del cutis, siendo el primer grupo calmante de la piel, y el segundo regulador de cutis mixtos y grasos. En todo caso, son hidratantes estimulantes de la regeneración celular.
Si quieres aprender, tienes disponible un Taller digital compuesto de:
- Vídeo tutorial
- Documento PDF
- Consulta de dudas por chat.
¿Qué necesitas?
- Una hora de tu tiempo
- Agua destilada
- Aceite esencial de flores o plantas como: azahar, rosas, jazmín, lavanda, geranio o romero.
- Tensioactivo o emulsionante, (puede ser un gel de ducha neutro, sin aroma).
- Un bote medidor de volumen
- Un bote pulverizador para dispensarla
¿Cuánto vale?
Precio 25€.
¿Cómo adquirirlo?
Pago por Paypal, pinchando en la cursiva.
O también por Bizum, o transferencia al 670702262, si eres de España.
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¡A divertirse y relajarse creando aguas florales!
Alquimia del Patio 